Si ha pasado la fecha de caducidad, ¿podemos seguir consumiendo un alimento? La incorrecta lectura de los productos es responsable de un 10% de los alimentos que se despilfarran. Muchos productos se pueden consumir sin ningún riesgo incluso después de la fecha que aparece en el envase… ¡Solo hay que saber bien cuáles!
En el siguiente artículo, os contamos cómo funcionan las fechas de caducidad y las principales diferencias entre la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferente. Además de explicarte con detalle cómo consumir de forma responsable y por qué alguno de los productos caducados (que puedes encontrarte en una cesta sorpresa de Phenix App), se pueden vender y, por ende, consumir.
Tú también puede actuar contra el desperdicio
Fecha de caducidad y fecha de consumo preferente, ¿cuál es la diferencia?
Como os comentábamos en la entrada sobre el etiquetado de los productos, es muy importante descifrar qué significan todos y cada uno de los puntos que nos indican los fabricantes en las etiquetas. Ya que, leer de forma consciente el etiquetado de lo que compramos y almacenamos nos ayudará a reducir el desperdicio de alimentos.
Los productos que han pasado la fecha de consumo preferente se pueden consumir si el envase que los contiene no ha sido alterado. En cambio, los productos que han pasado su fecha de caducidad deben desecharse obligatoriamente, en la mayoría de los casos.
Algunos alimentos no tienen fecha de caducidad ni de consumo preferente. Es el caso de los productos que compramos en la panadería (pan, pizzas, focaccia,…), de las frutas y verduras, de los dulces (ej. caramelos), de las bebidas alcohólicas y del vinagre.
¿Se puede consumir un producto pasada su fecha de consumo referente?

La fecha de consumo preferente indica que el producto estará en perfectas condiciones de conservación hasta la fecha que marque el etiquetado siempre que se conserve de forma adecuada. Pasada esa fecha, la calidad del producto no será la misma, pueden cambiar su aroma y textura, pero no conllevará ningún riesgo para la salud.
Se trata de alimentos poco perecederos como los productos secos, esterilizados, liofilizados y deshidratados (tortas secas, latas), productos no secos que se pueden conservar durante mucho tiempo antes de abrirlos como purés, zumos de frutas, salsas, compotas… y también se acompañan con mensaje sobre su correcta conservación.
Esta famosa fecha se indica por «Consumir preferentemente antes del fin de» y se completa con el día, el mes o el año:
- Si la fecha de consumo preferente indica el día, mes y año, significa que el producto puede consumirse sin ningún riesgo hasta tres meses de la fecha indicada. Por ejemplo: si lees «Consumir preferentemente antes del fin de: 16/06/2021, se aconseja consumirlo antes del 16/09/2021, ósea ser: 3 meses después de la fecha indicada.
- Si la fecha de consumo preferente solo indica el mes y el año, el producto se puede consumir justo 18 meses después de la fecha. Por ejemplo: si lees «Consumir preferentemente antes del fin de: 06/2021, se aconseja consumirlo antes del 12/2022, ósea ser: 18 meses después de la fecha indicada.
- Si la fecha de consumo preferente solo indica el año, en ese caso el producto puede consumirse sin riesgo incluso más allá de los 18 meses siguientes a la fecha indicada. Por ejemplo: si lees «Consumir preferentemente antes del fin de: 2021, podrás comértelo tranquilamente en 2023.
¿Se puede consumir un alimentos pasada su fecha de caducidad?

A diferencia de la fecha de consumo preferente, la fecha de caducidad es una fecha que nos indica que podemos consumir ese alimento de forma segura hasta una fecha concreta. Dependiendo del producto, consumir el alimento cuando se ha pasado la fecha de caducidad puede suponer un riesgo para la salud.
Estas fechas conciernen principalmente a todos aquellos alimentos que, en la mayoría de los casos, guardamos en la nevera como carnes, embutidos, quesos, pescados, platos preparados, huevos, ciertos productos lácteos, etc. Su fecha de caducidad suele ir acompaña de un mensaje sobre su correcta conservación tales como: “una vez abierto, conservar refrigerado y consumir en un plazo de dos días”.
Atención: una vez pasada la fecha de caducidad, no congeles el alimento, supondrá un riesgo para tu salud de todas formas.
¿A qué productos debemos prestar especial atención?
Existen ciertos alimentos que, aparte de respetar fu fecha de caducidad, también debemos asegurarnos de almacenarlos correctamente para que no supongan ningún riesgo para la salud.
- Huevos: si los conservas en la nevera, puedes conservarlos justo 28 días después de la fecha que mencione en la etiqueta. Si quieres asegurarte de que el huevo está en buenas condiciones, haz el test de la flotación. Sumerge los huevos en un bol de agua: si flotan; están en mal estado. Si suben un pelín, te los tienes que comer en 48h y si se quedan en el fondo: están en perfecto estado.
- Carne picada: todo depende de cómo y dónde la hayas comprado y de cómo venga envasada. Si la has comprado en la carnicería, debes consumirla rápidamente. Si la has comprado en el supermercado y viene envasada, en algunos casos, es posible consumirla 1 o 2 días después de la fecha, pero como te comentamos más abajo, usa tus ojos, olfato y gusto. Y ante la menor duda, ¡no la consumas!
- Quesos: la mayor parte de los quesos pueden consumirse sin ningún riesgo, pero hay alguna excepción. Como sería por ejemplo el queso fresco, en especial si es de cabra.
¿Qué alimentos se pueden consumir pasada su fecha de caducidad?
Aunque algunos alimentos se puedan consumir después de su fecha de caducidad, la forma en que se han almacenado marca la diferencia. ¡Nuestro primer consejo es que confíes en tus sentidos! Mira el producto, huélelo, pruébalo y si te genera dudas, mejor no lo comas.
- Paquete abierto: fíjate en los paquetes abiertos cuya fecha ya haya pasado. La mayonesa, por ejemplo, indica «Consumir preferentemente antes del fin de…», sin embargo, esta fecha solo es válida si el envase sigue cerrado.
- Productos secos: los dulces, por ejemplo, se pueden comer incluso después de la fecha indicada y a pesar de que el paquete esté abierto.
- Alimentos enlatados: primero, inspecciona la apariencia del envase (suelen ser de metal), ¿está deformado o muestra rastros oxidados? Si ves que está abultado en uno o más lados, mejor evita consumir el alimento.
La mayoría de veces, los refrescos y productos congelados se pueden consumir incluso después de la fecha indicada en el paquete.
Alimentos que nunca caducan
Existen alimentos que por desconocimiento, tiramos y que realmente, tienen una vida mucho más larga de la que creemos. Fíjate en cuáles son aquellos alimentos en perfecto estado aunque la fecha de caducidad indique lo contrario:
- Sal: nunca, nunca se caduca. El único problema que puede presentar es que se pegue por la humedad. ¿Cómo puedes evitarlo? Pon algunos granos de arroz crudo en tu salero y… ¡Listo!
- Azúcar: al igual que la sal, tampoco se caduca nunca. Si se forman bloques, es muy fácil de deshacerlos.
- Productos secos: pueden consumirse muchos meses después de la fecha de caducidad que indica el etiquetado.
- Leche: se puede consumir hasta 2 meses después de la fecha de caducidad, siempre y cuando el envase siga bien sellado.
- Chocolate: dura hasta dos años después de la fecha de caducidad indicada en el etiquetado.
- Enlatados y congelados: varios años después de la fecha de caducidad.
- Miel: no caduca nunca, eso sí, siempre puede cristalizarse, pero el baño maría lo arreglaría.
- Vinagre blanco: un alimento ideal, ya que no solo nos sirve para aderezar nuestros platos, sino también para la limpieza natural de nuestro hogar.
- Arroz blanco: este tipo de arroz se puede comer incluso años después. Solo te recomendamos que lo protejas de las polillas en un recipiente hermético y que lo enjuagues con agua antes de cocinarlo.
- Pasta: puedes consumirla mucho después de la fecha indicada, el único problema que puedes tener es con las polillas. Así que asegúrate que las guardas en un frasco hermético.
- Legumbres: los garbanzos y los frijoles son alimentos sostenibles que pueden almacenarse indefinidamente. Lo único que debes asegurarte es de que no estén precocinados. Debes guardarlos lejos de la humedad y recuerda remojarlos al menos 8h antes de su consumo.
- Quesos duros: dos semanas después de la fecha de caducidad
Ahora ya eres todo un expert@. La próxima vez que vayas a por tu cesta sorpresa Phenix, fíjate si los productos que te han tocado tienen fecha de caducidad o fecha de consumo preferente.